The Boxer Rebellion: Cinderella Band

The Boxer Rebellion

The Boxer Rebellion es un cuarteto inglés cuya historia va un poco al revés: fueron fichados por el gigante Mercury incluso antes de publicar su primer larga duración. El coloso lanzó su primer trabajo, pero los abandonó a pesar de la buena acogida de la crítica y del público. Entonces, The Boxer Rebellion tuvieron dos opciones: dejarlo o perseverar.

Charlamos con Nathan Nicholson, frontman de la banda, justo antes de los conciertos en confines hispanos que ofrecieron el pasado mes de octubre para presentar Promises, su tercer disco.

– Si tuvieras que escribir vuestra bio en la Wikipedia, ¿cómo empezaría?

– «A medida que iba amaneciendo un nuevo siglo, bañado por la incierta luz londinense, un grupo nació y se bautizó The Boxer Rebellion. Sin prisa pero sin pausa, se convirtió en la segunda banda más grande del mundo cuyo bajista se llama Adam (…después de U2).»

– Habéis encontrado el nombre The Boxer Rebellion en un diccionario de historia, pero ¿por qué lo habéis escogido? ¿Ha sido por su significado o simplemente porque os gusta cómo suena?

– ¡Ambas! Puede que al principio porque nos sonara bien, pero luego el acontecimiento histórico nos intrigó también.

– Podemos oír algo de muchos subgéneros de rock (el experimental de Radiohead, el post-punk de Editors o incluso el alternativo de los primeros U2), todo ligado con algo de pop y mucha personalidad. ¿Qué grupos son los que más os han influido como banda?

– Los 4 tenemos tantas influencias individuales que a veces es difícil determinar cuál podría haber tenido la mayor repercusión sobre nuestra música. Sin embargo, como grupo, todos amamos a Radiohead desde siempre, así que si nos preguntaras cuál nos pone más de acuerdo, serían ellos.

– Erais jóvenes promesas y Mercury os fichó incluso antes de publicar el primer disco. Sin embargo, tras publicar Exists os han dejado inexplicablemente tirados. ¿Nos contáis qué ha pasado después de eso?

– Básicamente eramos parte de un conjunto de artistas que fueron fichados al mismo tiempo por Mercury desde el sello Poptones. Las primeras publicaciones de esos grupos no tuvieron muy buena acogida, así que la discográfica decidió cortar la financiación. Desafortunadamente para nosotros esa decisión se tomó antes de que se publicara nuestro primer álbum, y eso significaba que la semana después del lanzamiento de Exists, Mercury nos dejaría. Muchos se hubieran rendido pero nosotros decidimos perseverar y al cabo de un par de años escribimos Union.

– Y entonces llegamos a Promises. ¿Cuál fue el proceso para componer este disco? ¿Qué diferencias hubo con los anteriores tres? ¿Qué cambió?

– Pues, cambió absolutamente todo el proceso. Esta vez, en lugar de tocar todos juntos en un estudio, decidimos comprar equipos y grabar a medida que componíamos, sobre la marcha. Tuvimos la capacidad de escribir cada parte por separado y analizarlas más a fondo. El resultado fue un sonido mucho más limpio y en el que cada parte contaba, además resultó ser un método mucho más eficiente – podíamos saber al instante qué canciones necesitarían trabajo y cuáles simplemente había que tocar en el estudio.

– ¿Qué significa para ti Promises?

– Es un disco que contiene mucha luz y mucho amor. Plasma la conciencia de la felicidad que conlleva conocerse a uno mismo. La juventud puede ser sobrevalorada e insegura, pero con el paso del tiempo las cosas mejoran y la vida se hace más bella en muchos más sentidos de los que jamás pensaste.

– Hay una atmósfera muy onírica que cubre todo el disco. ¿Por qué o cómo habéis cambiado de dirección hacia estas melodías de ensueño?

– Siempre nos ha seducido la música atmosférica, la que te lleva lejos durante un momento. Creo que el escapismo es una de las cosas más importantes en el arte. Cuando se emplea bien te lleva a otro lugar, lejos de lo mundano y del estrés de la vida. Para nosotros, hacer este tipo de arte es una gran prioridad.

– Desde febrero habéis estado tocando por Inglaterra, en festivales y ahora os habéis embarcado en una intensa y extensa gira. ¿Es todo tan molón como pensamos todos o a veces se hace pesado como un trabajo?

– ¡Es todo tan molón como crees! Hemos hecho los conciertos más grandes de nuestras carreras y hemos disfrutado de verdad. Probablemente es más trabajo de lo que la gente suele imaginar cuando piensa en la industria musical, pero para nosotros ganarnos la vida tocando sigue siendo un privilegio.

– Hablando de conciertos, ¿qué tal está la cosa en el Reino Unido? ¿Las instituciones y el gobierno apoyan y promueven la música en directo o es todo lo contrario?

– No diría que ayudan mucho. Recuerdo una subvención gubernamental para facilitar la concesión de licencias para conciertos en sedes pequeñas, hace un par de años, pero desde entonces se han llevado a cabo recortes – como en muchos otros países – y el arte en general ha sufrido mucho esta política, como era de esperar. La música en vivo en el Reino Unido por lo general es próspera, pero no diría que es gracias al gobierno.

– Y con respecto al arte y la cultura en general, ¿también estáis experimentando la decadencia que vemos en nuestro país?

– Creo que en el Reino Unido hemos sido siempre bastante indulgentes cuando se trata de arte, para ser honesto. Como he dicho, los directos están pisando fuerte últimamente, pero parte de eso es por el cambiante consumo de música en general. Por el resto, nunca oyes hablar de gente peleándose por comprar grandes obras de arte (de la que sea). En mi opinión amamos el arte en general.

– Bueno, habéis girado por toda Europa y los Estados Unidos y cosechado fans en ambos continentes. Sin embargo, esta es vuestra primera vez en España (salvo cuando teloneasteis a Editors). Los españoles parecen resistirse a vuestra música. 

– Hemos querido volver a España y hacer nuestros propios conciertos desde que teloneamos a Editors. Sencillamente, no se había dado la ocasión todavía hasta el pasado mes de octubre. Yo he estado en España varias veces y me encanta, así que me fliparía convertir nuestros conciertos aquí en un hábito. Madrid es una de mis ciudades favoritas en el mundo y siempre estoy ansioso por volver.

– Hablando de fans: sois una banda completamente independiente: ¿qué tan difícil es llegar a la gente?

– Aunque por un lado es extremadamente gratificante ser completamente independiente, y hay muchísimos aspectos que disfrutamos, que todo hay que decirlo, también es verdad que una de las partes más complicadas es llegar a nuestros fans tanto como nos gustaría. Obviamente, ciertas circunstancias y los presupuestos dictan ley en lo que hacemos. Por mucho que nos encantaría salir al mundo y tocar para todos y cada uno de nuestros fans, es difícil incluso acercarse a eso – hasta las mayores bandas del mundo tienen que pelear con eso.

– Ya que estamos, un mensaje a los que no conocen vuestra música: ¡decidles por qué debería escucharla!

– Pues, porque a mi madre le gustamos y ella siempre y solo dice la verdad.

– ¿Por qué canción recomendaríais empezar?

– Esta es difícil, eh. Mi canción favorita de entre las nuestras es ‘Cause For Alarm’ de The Cold Still, sin embargo rara vez la tocamos en concierto. Es más un éxito de estudio que un tema para tocarlo en directo. De todos modos, nuestra mejor canción es ‘Diamonds’, hasta a mí no me importa escucharla, incluso después de todas las veces que la he oído y tocado. Empezar por lo mejor es siempre un buen consejo.

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– ¿Nos contáis vuestra anécdota más graciosa?

– Algo de lo que esta banda siempre podrá presumir, y estoy seguro de que muy pocas otras pueden, es que hemos tocado en un sitio en el que un perro se subió al escenario con nosotros y olfateó nuestros amplis. Era un perro sordo, pero era un perro, después de todo. Fue hace mucho tiempo ya, y me gusta pensar que hemos avanzado desde entonces, pero estoy extrañamente orgulloso de que durante un rato fumos un quinteto que incluía a un perro. Tenía mucha presencia escénica, pero le faltaba creatividad, sabes.

Puntuación de los lectores

1 comentario en «The Boxer Rebellion: Cinderella Band»

  1. Muy bien, Roberta, pero a ver si reapareces antes del cinco de diciembre para que vayamos a la Fnac a que nos firme Mr.Luque el disco, just saying

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