[Crónica] Digitalism live @ Privilege con Burn

Hace años prometí que no volvería a Ibiza. Ya disfruté de su fiesta, me cansé de sus macarras y exprimí sus diversos encantos todo lo que tenía que exprimir, pero claro, era una de esas promesas trampa, como las de “el lunes me pongo a dieta”, en las que esperas cualquier razón por muy mínima que sea para no cumplirlas. La diferencia es que esta vez, la razón era de peso.

Y la razón se llama Digitalism, dúo alemán de electrónica, con ciertos toques indies, que revienta las pistas del país que sea. Y el culpable de tal desliz: Burn.

La famosa marca de bebidas energéticas nos proponía un plan perfecto, viaje relámpago a Ibiza para cubrir el concierto de los alemanes, proposición que como todos comprenderéis no se podía rechazar. Y allí se fue un servidor acompañado de unos completos desconocidos, pero que han resultado ser unas personas cojonudas y unos compañeros de viaje a la altura (Gracias Jorge, Aleix, Paula, Gonzo, Sergio, Señor de los barcos a 100 euros, Cougar Siliconada y demás espécimenes de Isla Blanca).

La noche empezó en Privilege a las 00:00, sonaba Deep House de calidad y las bolas esas de matojos de las películas del oeste cruzaban de un lado a otro la discoteca más grande del mundo… A medida que nos íbamos adentrando en la madrugada la cosa se fue animando, los BPM´s de la música iban aumentando y los alrededores de la piscina de Privilege se iban llenando de un público de lo más heterogéneo.
Pero lo que nos ocupa, y lo que nos había llevado a Ibiza, empezó a eso de las 3:00. Una gran cortina del tamaño de medio campo de fútbol dejó ver una pantalla de similares proporciones y tres personitas rodeadas de multitud de neones empezaron a lanzar los acordes de Stratosphere. Jens e Ismail, acompañados por la batería de Anthony, estaban ahí dándolo todo y con claras intenciones de reventar Privilege. Y desde luego lo consiguieron, la temprana Idealistic levantó hasta a las maduras inglesas de 60 años que habían ido exclusivamente a pillar cacho (lo juro) y los temas de sus dos discos se fueron sucediendo uno detrás de otro como 2 Hearts en versión remix, Circle o Forrest Gump (hubiera sido un puntazo haber llevado a Casablancas), pero lo que todos esperábamos, aunque eso significara el final de una hora de intensidad descontrolada, era Pogo y llegó y nos volvimos locos y nos pusimos tristes.

Esta era mi segunda vez con Digitalism y he de decir que han mejorado su directo, la puesta en escena es espectacular, el sonido mucho más contundente y esos toques indies (potenciados) de los temas del I love you dude ayudan a llegar a todos los públicos, aunque siguen teniendo el mismo defecto que ya había notado anteriormente: la voz de Jens.

No hay ni que decir que la noche se extendió unas horas más viendo pinchar a Cassius y a Audiobullys, pero eso lo dejo para otro post…

En definitiva, un gran viaje de la mano de Burn, un gran concierto que no olvidaremos y una noche que todavía y a pesar de ser jueves sigue pasándome factura.

Gracias a todos los que disfrutasteis de esto y gracias otra vez a Burn. Esperamos la siguiente como agua de mayo!! 😀

Puntuación de los lectores

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.